Hace mucho tiempo, de hecho varios años, que escribí este “relato”. Creo que es uno de mis escritos más personales, sin embargo ahora no consigo recordar si llegó a publicarse en alguna otra web. En realidad ha permanecido olvidado en algún rincón de mi ordenador y solo lo he recordado recientemente por dos circunstancias. La primera fue una conversación con un amigo sobre una de las novelas que está escribiendo a raíz de lo etéreo que se menciona en ambas historias. Por otro lado vino de nuevo a mi mente en una situación más triste y repentina, el fallecimiento de una persona a la que apenas acababa de conocer pero que en tan poco tiempo marcó mucho mi vida. Es a esa persona a la que ahora va dedicado este relato.

A la memoria de E.G. que ya llegó a casa.

 

AL FIN

 

Tenía los ojos cerrados pero no dormía. Aunque un extraño sopor la invadía y ella, perezosa, le permitía a su cuerpo impregnarse de esa agradable lasitud.
Sentía como el calor poco a poco abandonaba su cuerpo y era sustituido lentamente por una agradable sensación de frescor.
El fuego había consumido su cuerpo durante toda su vida y ahora, al fin, dejó que cada poro de su piel fuera refrescado por esa agradable y fría sensación.

Notaba como el cansancio que siempre había creído parte de si misma, como el peso que la oprimía a cada instante desde el primero de sus días se hacía más liviano.
Era como si alguien, primero le ayudara a soportar la carga de algo inmenso en su espalda para luego lentamente ir quitándoselo, hasta que al final el peso desapareció.

Se sintió ligera, casi como si estuviera hecha de aire, un aire fresco y maravilloso.
Sentía como si su cuerpo comenzara a elevarse y disfrutó un instante de la sensación.
Una alegría infinita se apodero de ella y entonces comenzó a abrir los ojos.
La incertidumbre ya no tenía cabida en ella. Sabia perfectamente que el momento tan deseado, había llegado al fin.

Abrió lentamente los ojos y no pudo evitar hacer un guiño y arrugar un poco su respingona nariz. Sonrió ante lo absurdo de su gesto. Quizás creía que una brillante luz la deslumbraría pero no fue así. Una hermosa bruma blanquecina la rodeaba y dejaba ver un entorno algodonoso y difuminado con una variedad asombrosa de tonos grises.
Alargó una mano como queriendo tocar la belleza vaporosa que la rodeaba pero al contemplar su largos dedos se detuvo.

Observo con atención, pero sin mucho asombro su translucida piel. Su cuerpo ahora de una blancura etérea confirmaba su, mas que sospecha, certeza de que ahora era el momento.
Notó entonces una presencia detrás de ella y esbozando una leve sonrisa se volvió.

-Así que por fin llegó la hora. ¿Verdad? .- Preguntó aunque conocía perfectamente la respuesta.

El joven que la miraba desde sus profundísimos ojos oscuros, no habló. Tan solo hizo un gesto afirmativo con la cabeza que hizo que su irrealmente liso y brillante cabello negro oscilara suavemente.

-Sabes que te llamé muchas veces.- Siguió diciendo ella mirando complacida el largo cabello de él. Casi sentía el deseo de perderse entre sus finas hebras .- Hace mucho tiempo que te esperaba.

-Entonces no era el momento.- Dijo él con una voz fría y susurrante como la caricia de un afiladísimo cuchillo.

-Supliqué tantas veces que todo terminara. Muchos dijeron que me esperaba el infierno. Ignorantes.- Continuó ella mientras sus ojos comenzaban a brillar con la intensidad de una tea ardiendo.

-Ellos no tienen por que saber.- El muchacho la miró fijamente mientras continuaba hablando.- Tú eres diferente. Tú estabas despierta. Nunca es fácil el camino para los despiertos. Pero has llegado. Has salido del infierno.

El muchacho de piel blanquísima extendió un finísimo brazo hacia ella diciendo:
-Ahora ya puedes acompañarme.

Ella tomo su mano y se acerco lentamente a él .
El abrazo que tuvo lugar entonces surtió el mismo efecto que el agua fría en un día especialmente caluroso.
Todo el fuego, todo el peso, todo el dolor, desapareció en el acto y su pecho estallo de alegría.
Le miró fijamente una vez más y no dijo nada, no hacían falta más palabras. Por fin estaba en casa.

 


Título: Under the cheery moon
Dirección: Prince
Año: 1986
Duración: 98 min.
Interpretes: Prince, Jerome Benton, Kristin Scott Thomas, Steven Berkoff, Emmanuelle Sallet, Alexandra Stewart, Francesca Annis, Pamela Ludwig, Barbara Stall, Karen Geerlings, Victor Spinetti, Myriam Tadesse, Moune De Vivier, Amoury Desjardins, Garance Tosello

Cuando un artista fallece inmediatamente todo su trabajo vuelve a aparecer de golpe con más fuerza que nunca. En el caso de Prince no podía ser menos. Así que después de sonarnos los mocos y limpiarnos las lágrimas, sus fans, volvimos a abrazar sus discos y a bañarnos en su música. Pero algo que todo fan hardcore de Prince que se precie está obligado a hacer es ver sus películas. Yo ya he visto muchas veces sus películas, por eso quizá he esperado más tiempo para hacer un revisionado. Pero ese momento llegó y me hizo tomar una decisión.

Reseñar una de ellas en el blog. Lo lógico hubiera sido reseñar Purple Rain, porque indudablemente es la mas famosa de las tres y la que le catapultó a la fama. Pero resulta que para asombro general Purple Rain no es mi película favorita de las tres que protagonizó Prince.

De todas ellas, Graffiti Bridge es directamente una tortura para el espectador, por lo menos para mi, principalmente porque pretende ser tan onírica, tan espiritual, tan existencialista que no se entiende ni a si misma. La segunda en el ranking es Purple Rain, que si bien tiene un tinte dramático que no le sienta nada bien, unido a las pobres interpretaciones (sobre todo en cuanto a la típica actuación de pobre muchacho con talento pero con situación familiar problemática) al menos sí puede aportar la experiencia de su música. Purple Rain es disfrutable precisamente por las actuaciones y ya. Eso nos deja a la tercera película Under The Cherry Moon como la ganadora del puesto a mejor película de las tres y evidentemente la más disfrutable de todas. Si bien, Grafiiti Bridge requiere un arduo esfuerzo por mi parte para enfrentarme a un revisionado cosa que no sucedía desde hace años, y Purple Rain es una película que puedo revisionar de vez en cuando, sobre todo cuando ando un poco morriñosa, lo cierto es que Under The Cherry Moon no solo es una película que puedo ver muchas veces, sin dejar pasar demasiado tiempo, si no que además disfruto viéndola, me río mucho con ella y hay escenas que no me canso de ver y prácticamente me sé de memoria. Sí, ya lo sé, esto tendría que hacérmelo mirar.

*****¿Es Under The Cherry Moon tan mala película como se dice?*****

Pues sí y no. Lo he dejado clarísimo ¿verdad? Bueno, intentaré explicarme mejor. Digamos que tiene cosas malas pero también tiene cosas buenas, lo que ocurre es que en el momento en el que llegó y dada las expectativas de los fans por un Purple Rain 2, la cosa decepcionó tanto a los que no tenían ningún interés en Prince como a sus fans. Como siempre, las expectativas, cuanto daño han hecho.

La primera película de las tres mencionadas fue Purple Rain y llevaba una linea que se ha repetido infinidad de veces con otros artistas, una especie de historia autobiográfica con más o menos drama, salpicada de temas musicales, para lucimiento del músico en cuestión. En eso Purple Rain cumple como cualquier otra. Y ese quizá es el secreto de su éxito en el momento. Prince tiene mucho carisma y eso se refleja en pantalla, no le hace falta actuar bien y casi le perdonas el exceso de drama cuando llegamos a la parte de las actuaciones musicales.

Después de esto era obvio que la gente esperaba una segunda película que siguiera la misma linea de Purple Rain y entonces llega Under The Cherry Moon y la gente se queda con cara de vaca viendo pasar el tren.

Under The Cherry Moon no tiene drama, bueno, en teoría sí tiene una pequeña parte dramática, pequeñísima aunque vital, no puedo decir más, pero realmente no inspira drama de verdad. Un lío, ya lo sé, pero no puedo decir más sin destripar completamente la película. El caso es que lo que aquí tenemos es una comedia, con todas las letras y además no es un musical, de hecho la música está ahí como en cualquier peli normal excepto una actuación musical puntual durante la película y otra en los títulos de crédito finales. Así que criticarla como drama musical ya es un error de base.

Por tanto tenemos a Prince en una comedia, rodada en blanco y negro y que además no es un musical y eso ni a los fans parecía convencer. Así que batacazo de taquilla, criticas cebándose con ella y varias nominaciones a los premios Razzi (Golden Raspberry Awards), de los que hablaré más abajo porque requieren mención especial.

La cosa evidentemente no pintaba muy bien, pero como siempre suele pasar, con el tiempo lo que era tan malo ya no lo parece tanto y algunos titanes (también llamados sufridos y pacientes cinéfilos) empleamos nuestro tiempo (tampoco tengo nada mejor que hacer, la verdad), en rescatar y hacer un poco de justicia con esta película.

Aunque es obvio que no debo ser la única que piense así, lo más seguro es que no encontréis ninguna crítica buena sobre esta película, o tal vez sí si tenéis mucha paciencia buscando, pero lo más gracioso es lo que ocurre cuando se comentan o se cuelgan en youtube u otros medios escenas de esta película y de repente la gente aparece de debajo de las piedras, para reconocer lo que le gusta esa escena, lo que le hace reír, etc. O sea la gente de a pie, la que no tiene que dárselas de hipercultos y gafapastas del cine. :P

Así que ahora os suguiero que toméis asiento, si aún no lo habéis hecho, y si os quedan ganas de seguir leyendo aquí tenéis a esta fan de la serie B, del terror, los musicales, las películas mudas, el cine en blanco y negro, las comedias y los films rarunos en general, dispuesta a hacer justicia.

 

*****La historia*****

La película nos habla de Christopher Tracy (Prince) y su amigo Tricky (Jerome Benton), dos gigolos que tienen su campo de acción en Niza donde ambos se mantienen a base de conquistar mujeres adineradas. Christopher y Tricky descubren que Mary Shanon recibirá una suculenta herencia al cumplir 21 años y precisamente eso va a ocurrir ese mismo día en el que además tendrá lugar una fiesta de cumpleaños en la que se colarán ambos con el propósito de conquistarla.

Este argumento, si bien tampoco es muy original sí funciona perfectamente en una comedia romántica aunque al menos debería haber sido trabajado un poco, porque realmente no hay mucho más allá del consiguiente romance que lo cambia todo.

 

*****Lo peor de la película*****

Vamos a empezar por lo fácil, lo peor de la película, lo que todo el mundo critica y lo que en definitiva echa a perder el proyecto en si.

Lo primero a mencionar es el guión que es muy pobre, en realidad no da para una película, o esta ha sufrido muchos recortes o realmente más que un guión ha sido un esbozo general al que le falta mucho para ser redondo. En realidad el problema principal es que tanto la idea como el concepto en general parece orientado, más que a una película, a un videoclip musical largo, de esos que tienen una parte de historia que a veces dura más que la canción en si. Como película le falta chicha, como guión de videoclip sería estupendo. Esto es algo que retomaré más adelante cuando mencione precisamente un videoclip musical en concreto. Esta pobreza de guión hace que al final la película parezca más una sucesión de sketches que una película compacta y sin rupturas. Aquí presumo que también tiene que ver mucho el montaje, que debe haber recibido muchos tijeretazos mal dados.

La química entre Christopher (Prince) y Mary (Kristin Scott Thomas) que brilla por su ausencia. Parecen dos imanes del mismo polo repeliéndose mutuamente. Las escenas en las que están enamorados son como dos carámbanos de hielo intentando hacer fuego. La cuestión es que hasta ese momento de enamoramiento la cosa funciona muy bien, los duelos dialécticos son muy divertidos pero es enamorarse e irse todo al garete.

Lo sobreactuado de Prince en muchas escenas, sobre todo se nota cuando está acompañado de otros actores mas curtidos. Las expresiones y las poses y movimientos de diva de Prince, que a veces son excesivas. Prince no es ni buen ni mal actor, digamos que Prince solo sabe hacer de Prince, ni siquiera se tiene que esforzar en actuar. El papel que hace de conquistador realmente parece más bien una auto parodia, lo cual de ser así logra su propósito llevándolo al ridiculo. Para ver esto nos sirve de ejemplo el trailer (que parece haberlo hecho su peor enemigo) porque han elegido todas las partes más ridiculas y bochornosas de la pelí. Realmente lo peor está en el trailer, el resto de la peli es mejor.

Por supuesto el mencionado trailer. Es el peor trailer cinematográfico que he visto en mi vida, de hecho por más que intento hacer memoria, no se me ocurre uno peor. Es una recopilación de las peores secuencias de la película y con una voz en off que parece que le importa un pimiento lo que está diciendo. Lo único bueno del trailer es precisamente la canción Kiss, y ni por esas. De hecho mejor escuchar la canción sola sin sufrir la tortura de ese trailer espantoso. Si no me creéis aquí lo tenéis.

 

*****Lo mejor*****

El humor, en el que también juega un buen papel esa sobre actuación y esas poses, esa exageración que roza el absurdo. La película está concebida como una comedia romántica pero pasada de rosca. De hecho algunos primeros planos, son tan sobre actuados, tan expresivos que parecen puramente de cine mudo. A veces da la impresión de que estás viendo una película típica de divas de cine mudo pero rodada en los años 30 en pleno glamour hollywoodense. Como ejemplo tan solo mirad la cara de Mary (Kristin Scott Thomas) y su aspecto de diva del cine mudo, durante la famosa escena del “Wrecka stow” que además es realmente divertida.
Esta escena no es más que una tomadura de pelo que Christopher y Tricky le hacen a Mary, para quitarle un poco de soberbia a la moza que se cree mujer de mundo sin haber salido nunca de su casa, y que es en realidad un juego de palabras fonético. Prince es muy dado a usar estos juegos fonéticos y si veis los títulos de sus canciones y las letras, cambia palabras por otras con el mismo sonido, por ejemplo “2 U” para decir “to You”. Pues esto es mas o menos lo mismo. Wrecka Stow visto así escrito no parece significar nada pero si lo pronuncias suena igual que otra cosa que si tiene significado, de ahí la tomadura de pelo.
Mejor os dejo la escena para que la veáis vosotros mismos. Venga haced un esfuerzo, que para eso me he molestado en subtitularla :P

 

Esta escena me lleva a otra cosa buena del film, la química entre Christopher Tracy (Prince) y Tricky (Jerome Benton). Si bien tenemos en la parte romántica los duelos verbales de Mary y Christopher (Kristin Scott Thomas y Prince) está química se diluye completamente cuando pasamos a la fase de enamorados, demostrándonos que hay más química entre Christopher y Tricky que entre Christopher y Mary. Y es precisamente ese entendimiento entre Prince y Jerome el que ha dado escenas muy divertidas que se han mantenido durante toda la película. A mi esto me ha recordado a las típicas comedias clásicas de dos actores y la verdad es que en ese aspecto la cosa ha quedado bien. También es cierto que yo encuentro a Jerome muy divertido, no sé porque pero me resulta simpático y me hace gracia por si solo en todas las películas. Pero en esta, en la que Prince decide quitarle un poco de drama a la cosa, la combinación de ellos dos es lo que más vidilla le da.

Otro aspecto muy bueno de la película, para mi de lo más remarcable, es el aspecto estético, la fotografía, la ambientación, los decorados, el blanco y negro, todo lo que hace que visualmente sea una delicia. Esa mezcla de cine años 30, en la que se colocan elementos actuales (bueno actuales en la época en la que se rodó, los 80) crea un entorno con mucho glamour y muy atractivo, una mezcla familiar y original a la vez. Creo sinceramente que este aspecto incluso puede escapar de las criticas más furibundas. Una muestra de esto podemos verla en otra escena en la que Christopher entra con Mrs. Wellington, una de sus clientes (ya hemos dicho que Christopher es un gigoló) en su casa y escuchan el mensaje que ha dejado en el contestador otro de los amantes de Mrs Wellington, mientras Christopher toca el piano y va respondiendo a su manera. Esa escena me encanta, por el papel que juega el teléfono, por lo rítmica y divertida que es, por ese toque de comedia clásica, por la música y por que visualmente es una delicia.

 

*****La música*****

Es una película de Prince y sin embargo no es una película musical, aquí la banda sonora funciona de acompañamiento, realmente la mayor parte de tiempo la música se intuye realmente, lo que te deja con ganas de escuchar los temas completos. Aparte de verle tocando el piano al principio de la película, tan solo podemos ver dos temas interpretados por Prince. El primero es “Girls & Boys”, que tiene lugar justo después de la escena de Wrecka Stow y el segundo sucede durante los títulos de crédito finales y se trata de “Mountains”.

En cuanto a la canción de Girls & Boys retomo lo que dije anteriormente respecto a que funciona mejor como videoclip que como película. Si vemos la actuación en la peli y luego vemos el videoclip, yo me quedo indudablemente con el segundo, incluyendo el despropósito final con Jerome de protagonista. Además en el videoclip aparecen, como si en ese momento estuvieran dentro de la película, la banda de Prince y también su novia de aquel entonces, Susannah Melvoin (hermana gemela de Wendy Melvoin). Susannah en principio iba a hacer el papel de Mary pero al final fue Kristin Scott Thomas la encargada de interpretarla. En este videoclip podemos ver a Susannah junto a su hermana Wendy, y quizás podemos preguntarnos ¿que tal hubiera sido esa química entre Mary y Christopher si hubiera sido Susannah quien le diera vida a Mary?

 

Lo que es indiscutible es que esta “mala” película ha dado un gran disco. Parade (así se llamó el álbum con la banda sonora de Under The Cherry Moon), bajo mi punto de vista es una joya.

Ahí no solo encontraréis las ya mencionadas Kiss (que podéis escuchar en el trailer), Boys & Girls y  Mountains, si no otras que aparecen de forma más sutil durante la película y que me parecen maravillosas, como la propia Under The Cherry Moon, Christopher Tracy´s Parade, Do U Lie, Sometimes It Snow In April, y en realidad todas pues es un disco perfecto.  Es obvio que es uno de mis favoritos dentro de la discografía de Prince y aquí os dejo el album en Spotify para que podáis disfrutar de el.

****Sobre premios buenos, malos y reguleros*****

Este último apartado en realidad es solo una reflexión sobre los premios en general y los premios cinematográficos en especial, si no me merecen mucho respeto ya de por si, concretamente los premios Razzie ya me parecen de traca. En realidad no deja de ser más que un espectáculo que se nutre de otorgar sus galardones a películas y actores o artistas famosos, entre otras cosas porque eso vende más. Así que el hecho de que una película tenga nominaciones a estos premios para mi no es necesariamente algo malo. Y para muestra un botón. En 1986 Under The Cherry Moon estuvo nominada en 8 de los 11 apartados que tienen los premios razzie, concretamente en los de peor película, peor director, peor actor, peor actor secundario, peor actriz secundaria, peor guión, peor nueva estrella, peor canción original. De estas nominaciones acabó llevándose 5 premios a saber; Peor Película (premio compartido con Howard Un Nuevo Héroe. Sí, la del pato), Peor Director (Prince), Peor actor (Prince, que competía por el premio con Sean Penn, Emilio Stevez, Judd Nelson y Silvester Stallone, este último un gran veterano en estos premios, y uno de mis actores adorados), Peor Actor Secundario (Jerome Benton, compitiendo contra Peter O´Toole, Tim Robins, Brian Thompson y Scott Wilson), Peor Canción Original (Love or Money, canción que no fue incluida finalmente en el álbum Parade). Con esto quiero decir que todas las películas que fueron nominadas en alguna categoría son películas muy conocidas, y eso bajo mi punto de vista es una estrategia de puro marketing.

En todos estos años, desde 1980 que se crearon estos premios hasta la actualidad pues aún siguen en activo, han tenido el dudoso honor de ser premiados con un Razzie directores como; Michael Cimino, Blake Edwards, Paul Verhoeven, M. Night Shyamalan y también estuvieron nominados aunque sin llegar a ganar directores como Stanley Kubrick o Brian De Palma.

Si entramos en nominaciones a actores nos encontramos nombres como Lawrence Olivier, Dom DeLuise (este es curioso porque ganó el premio a la peor actriz de reparto por Terrorífica Luna de Miel donde interpretaba el papel de tía Kate, película muy divertida que os recomiendo ver), Daryl Hannah, Liza Minnelli, Dan Aykroyd, Kevin Costner, Tom Selleck, Burt Reynolds, Woody Harrelson, Faye Dunaway, Sharon Stone, Dennis Hopper, Demi Moore, Marlon Brandon, Melanie Griffith, Bruce Willis, Leonardo DiCaprio, Pierce Brosnan, Kevin Kline, Roberto Benigni, Halle Berry o Sandra Bullock. Estás dos ultimas actrices recogieron el premio de una manera muy divertida. Por un lado Halle Berry recogió su Razzie llevando en la mano su Oscar y 5 años después sería Sandra Bullock la que se presentaría a recoger su Razzie llevando consigo un carrito con copias en dvd de su película para repartir a los miembros de los premios Razzie.

Evidentemente los premios Razzie me merecen tanto respecto como casi cualquier otro premio, ninguno. La moraleja de todo esto es que siempre juzguéis por vosotros mismos.